Rodrigo Sánchez Sosa (1969) es periodista, investigador y cronista de Sayula. Estudió la licenciatura en filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Guadalajara. Durante algunos años fue profesor de bachillerato en la Escuela Preparatoria Regional de Sayula, Módulo Amacueca. En 2006 participó en la organización de la ruta cultural El Realismo Mágico de Juan, proyecto de los gobiernos federal y estatal. Asimismo, es miembro fundador del comité organizador del Festival Rulfiano de las Artes de Sayula. Ha colaborado en los periódicos El Sur, Horizontes, Sayulense, Tzaulan y Milenio. En 2018, la Secretaría de Cultura del Gobierno del Estado de Jalisco publicó su obra Sayula, del antiguo Tzaulan al Sayula de los Pérez Rulfo. En 2021, la Editorial Página Seis publicó Los murales del barrio de San Miguel, microhistoria de una identidad en Sayula. Están en preparación las siguientes obras: Cien años de carnaval en Sayula, Mitos, leyendas y personajes populares de Sayula y Casa Ramos-Uribe, Sayula, siglo XIX. Luis Fernando Santana Anguiano nació en Watsonville, California, en 1991, pero creció en Sayula, Jalisco, en el barrio de San Miguel. Durante la adolescencia estudió y trabajó con su papá Eligio en su taller de cerrajería, en donde aprendió a soldar y a fabricar herrería artesanal. A los 18 años regresó a California, a Los Ángeles, para trabajar en la compañía de motocicletas Vance & Hines como técnico en el departamento de búsqueda y desempeño. En 2017 se incorporó a la compañía S&S Cycles en La Crosse, Wisconsin. En 2021 renunció a sus empleos para perseguir una nueva profesión en la fotografía. En ese año, tomó las fotos de la cubierta del libro Los murales del barrio de San Miguel. En el 2022 regresó a los Estados Unidos, para trabajar, además de fotógrafo, como guía de balsa de remos en los ríos Snake, Grand Ronde y Lower Salmon, ubicados entre Idaho y Oregon. En 2023 se fue a Alaska a proseguir su carrera como fotógrafo para documentar glaciares y la vida silvestre. Actualmente, trabaja con el arquitecto Francisco Orozco en una obra llamada Casa Pina, en honor a la mujer de la portada del libro.